Es debida a una respuesta inmunológica desencadenada por una infección bacteriana localizada en los tractos gastrointestinal o génitourinario, además en la mayor parte de los casos suele dar positivo al marcador HLA B27.
Las bacterias responsables suelen ser las de los géneros, Shigella, salmonella, campylobacter y yersinia en el aparato digestivo.
En el génitourinario son las responsables las clamydias o ureoplasmas .
CAUSAS
La infección bacteriana que origina la respuesta inmunitaria anómala.
SÍNTOMAS
Los que constituyen el Síndrome de Reiter, uveitis(inflamación del ojo), uretritis no gonocócica y artritis. Suele comenzar con febrícula, artritis asimétrica sobre todo localizada en miembros inferiores. Puede acompañarse de diarrea, en ocasiones entesopatía (inflamación dolorosa en los puntos de inserción al hueso de músculos o ligamentos) en los glúteos, crestas ilíacas o pies.
Cuando se hace crónico el proceso puede afectarse la columna vertebral con una gran limitación de la movilidad.
Se puede acompañar con frecuencia de lesiones de la piel y de las mucosas sobre todo en boca, glande, etc.
TRATAMIENTO
Para el dolor y la inflamación AINE (antiinflamatorios no esteroideos).
Si en los análisis pertinentes se demuestra la existencia de infección, previo aislamiento del germen y antibiograma tratar con antibióticos.
Fisioterapia y reposo cuando sea necesario.
Tratamiento de mantenimiento mediante inmunosupresores.
Tetracosactida.
COMPLICACIONES
Aparte las derivadas de la inmovilidad articular que no suelen causar invalidez pueden aparecer alteraciones a nivel de:
Corazón, con alteraciones en la conducción cardíaca o derrame pericárdico.
Afectación de nervios periféricos, con neuritis dolorosa.
Afectación pulmonar con derrame pleural o infiltrados pulmonares.